BIOGRAFIA DE UNOS "HIJOS DE PUTA"

ADVERTENCIA PRELIMINAR

Esta es una historia recreada en la mente del Autor, cualquier parecido con la realidad es solo, una infeliz coincidencia que en todo caso, nos debe llevar a la reflexión de todos los lectores, especialmente de quienes viven en el Departamento de Ica, tierra del buen vino y del buen pisco.

También merece éste mi primer Libro, de otros que vendrán, la reflexión de los votantes que “construyen” con sus votos, liderzuelos de barrio, fantoches, vendedores de cebo de culebra, quienes ascendieron dos peldaños, se sienten en las nubes y prometen en sus borracheras a los áulicos y a los adulones que los escuchan, que serán “presidentes” del Perú, como si esta Patria nuestra se mereciera miserables calañas sin par, como si el país hubiera entrado a un estado de descomposición total, como si los rateros fueran desde ahora no solo la única clase política, sino, la clase dirigente del Perú.

Esta es también una historia recreada de un miserable que se hizo millonario robándole al pueblo y a su familia a la cual puso en peligro hasta en sus libertades individuales; y él, calculando todo para ser el centro sobre el cual debe girar el comportamiento de los demás, en su mayoría personas hambrientas de poder “provinciano”, gente sumergida en al anonimato y en la oscuridad, gente sin escrúpulos agazapados en la desesperación dispuestos inclusive, a delinquir tan solo por una cuota de poder o por dos centavos.

Es la historia también de dos de sus hermanos, “cortados por la misma tijera de la ambición pero sin la fineza del “Narrador” desesperados por acumular riqueza a cualquier costo inclusive a costa de sus honras personales, de sus mujeres y de su porvenir.

En fin es la historia recreada de unos de sus verdaderos “hijos de Puta”.

San Clemente , Noviembre del 2009

ELOY RAUL FARFAN GRANDA


CAP. I

NACIMIENTO DEL NARRADOR Y CRECIMIENTO DE UN MENTIROSO

Desde Apurimac, un Departamento de la Sierra centro – sur del Perú - desde allí proviene el Narrador, desde San Mateo un Villorio del Distrito de Tintay, Provincia de Aymaraes, al menos así lo contaba a quienes escuchábamos un poco extraviados por la verborrea emergente de éste contador de fábulas inexistentes, producto de la imaginación enfermiza de alguien que se preparaba para sorprender y encantar a todos a la vez.

…tenía nueve años cuando fui arrancado de las entrañas de la sierra - continuo - donde tan cómodamente me sentía, pasteándo las vacas, las llamas, los borregos las alpacas y los huanacos, con mi tostau a la espalda y una botella de chicha de molle que generalmente era cambiado al medio día por el almuerzo que la “chola” contratada por mi madre me traía, como para reponer las fuerzas que el intenso frío me hacía perder en las punas y en las llanuras donde llevaba todo el ganado a pastear, de paso que ya empezaba a inquietarme porque era voluminosa, chaposa y con un “occipucio” digno de ser observado; o tal vez, era enviada a propósito por mi viejo para que empiece el largo camino de “cosechar” hembras que mas tarde sobrepase varias decenas de veces los dedos de ambas manos.

Mi padre tenia la hacienda más grande de la Provincia de Aymaraes, incluso la más grande del Departamento, no había otra más importante en la región, ¡diez mil cabezas de ganado vacuno, veinte mil borregos, como veinticinco mil llamas, alpacas y guanacos!, la Hacienda no solo era grande, inmensa, sino la más productiva. Mandarinas y naranjas eran las frutas predominantes dentro de un área de trecientas hectáreas de extensión a men, de yucas, camotes y otros productos de pan llevar que mi padre sembraba y cosechaba.

Yuyo, el negro Manuel, Juanchito, Miquelón el mas “chibolo” de lo Regidores y los otros elegidos escuchábamos perplejos, boquiabiertos, perdidos en un ambiente de confusión, creer y no creer, - Confucio empezaba a quedarle corto – en el local de la Cámaras de Comercio de Pisco, ubicado momentáneamente en la avenida San Martín.

- Tiene Ud., la palabra Señor Alcalde, lo había invitado hacer uso de ella el “chino” Toguchi.
- Permítame Señor Presidente, antes quiero referirme sobre algunos aspectos de mi vida personal – espetó, el narrador con la frialdad de quién domina el escenario y vence fácilmente a su interlocutor y con la fineza de un consumado político.
- No se preocupe Señor Alcalde, hable Ud., de lo que quiera, le retrucó el Presidente de la Cámara de Comercio de Pisco.
- Es que es importante para mí, hablar de mis ancestros, de mi familia y del sufrimiento que pase allá, en los Andes. Del hambre histórico de la indiada problema que no acometió ningún tratadista, ningún ideólogo, ni siquiera Víctor Raúl, mucho menos Mariátegui…

- Puta Eloy ciño, que bacan habla el Narrador, como se traga a todos esos huevones que manejan la plata en nuestra Provincia. Mira, también lo escuchaban con atención, entonces es cierto lo que esta hablando no es un muerto de hambre, si bien es Cholo, pero es un serrano con plata, de alta sociedad de la sierra, tiene estirpe y abolengo tal vez desciende de Pachacutec, de Tupac Amaru o de algún Cholo importante que figura en la historia de nuestro país, o de esos cholos que hicieron historia sin estar en la historia.

- Negro, solo escucha con atención, no interrumpas, fijate en el fondo no en las formas, es importante qorque conviene llevarlos bien con todos los integrantes del comercio, con todos los asociados de la Cama´ra, date cuenta que ésta invitación no es gratis; que tiene por objeto coger de los huevos al Alcalde y tenerlo a merced de sus agremiados, seguro es que no quieren pagar la inmensa propaganda mural que se observa en toda la ciudad, a la fecha no han registrado un solo metro cuadrado de propaganda luminosa, los negocios cualquiera que sea su grio no tienen Licencia de funcionamiento, sólo quieren congraciarse con el Narrador, deja, mira y escucha, se los va a tragar a todos pero, va a dar la ipresión que ya se acomodó al poder, el Narrador tiene experiencia en mentir, fantasea y engaña con habilidad en eso no lo gana ninguno de nosotros, a pesar de su juventud miente sin tener asco, es un mitómano habitual, su vida misma es una mentira, es un hijo de puta, no porque su madre santa lo sea y a la cual dejamos fuera de ésta conversa, el hijo de puta es solo un galicismo, eso es en el Perú, el más pendejo, el más vivo el que gana a todos, no te olvides que no ganan los argumentos que contienen la verdad sino, los argumentos que se exponen con habilidad.

Entonces, y de pronto mi padre perdía la hacienda – continuó él Narrador – perdía los animales, perdía todo, es decir, o mejor dicho, se lo quitaban todo, era un acto abusivo de los militares que a través de la Reforma Agraria nos despojaban de nuestra propiedad y nos obligaban a dejar nuestra tierra, expatriados en nuestra propia patria.

Subimos nuestras cosas a los camiones que la familia tenía y aparecimos en Pisco,
Luego de bajar a Nazca, deambular por Palpa e Ica, nos parecían tierras demasiado áridas, sin agua y por lo tanto no propicias para una agricultura acorde con nuestras ancestrales costumbres de tener agua en abundancia no solo la del ría sino también el agua de las lluvias que en tiempos del “verano” serrano eran torrenciales y sufiecientes para lograr buenas cosechas que eran llevadas en su totalidad al Cuzco, en uno de los carros de mi padre Atejo, hombre promiscuo acostumbrado a las mujeres bonitas que “encontraba” en su calidad de chofer, al que le gustaba esa vida errante, - en cada retorán una chola que tirar-, ese era su lema. De esa vida bohemia tiene incluso varios hijos en otros compromisos; es decir, no reconocidos, de paso para demostrar que es el más macho de la familia, el más pendejo, el que más cholas se tira en toda la ruta que cubre, Nazca, Puquio, Chalhuanca, Andahuaylas, Abancay, hasta llegar al Cuzco.

Pero antes de retirarnos de nuestra tierra, de nuestra propiedad, de nuestro San Mateo querido, que con tanta nostalgia abandonábamos, mi padre Atejo, junto a mi Tío el Chiclán, - le decíamos así - por que nació con un solo huevo; osea, con un solo testículo, trabajaron toda la noche inyectando cianuro a cada una de las mandarinas y naranjas que habámos sembrado en la hacienda de mis padres y que estábamos a punto de cosechar, esa fue la cólera que los animó a ambos, la ira de dejar al nuevo dueño las trescientas hectáreas no solo sembradas de canto a canto, desde un cerro a otro; sino a punto de empezar la cosecha que iba a representar para a mi familia seguro, miles de soles de ganancias, nos dijeron además, que no habría retribución alguna por el trabajo realizado, por la siembra, por el cultivo. Tremendo gasto que nos dejaba en la calle, mucho menos, habría justicprecio por el terreno, era un abuso total, era la desgracia de todos los Zuñiga, los más adinerados, los más acomodados de la Región, no teníamos ya nada que hacer, solo abandonar la zona para no ser el “hazmerreír” de la gente, la burla de todos, solo cabía la huída, el alejamiento, el dejar el ganado, la siembra, la cosecha, la tierra, los amigos, el ambiente, la sierra linda con su azul cielo y sus nubes blancas recorriendo el espacio sideral, que parecían carneros echados empujados por el viento, alumbrados por el sol serrano ése que nunca deja de aparecer en los andes.

Y aquí nos asentamos al lado del río Pisco, en el Distrito más grande de Pisco, en San Clemencio, una loma costeña de suelo calichoso casi fosilizado que no sirve para construir casas, porque se corre el peligro de perderla por acción del agua que lava la sal produciéndose el inevitable asentamiento de la cimentación, chau, se acabo, perdiste la casa y toda la inversión que con sacrificio se hizo.

Fui el estudiante más aplicado de todos los tiempos, de la historia de la Gran Unidad “José Carlos Mariátegui” el primer Colegio que se construyó en San Clemencio, gane los primeros puestos hasta el quinto año de secundaria y sobre todo gane mi especialidad ,los concursos de oratoria cuyos discursos me preparaba mi hermano Cléstor el “ideólogo” de las cosas buenas y de las otras también porque es maquiavélico, sobre todo con las cosas oscuras, con la represión a quienes osan en oponerse a los Zuñiga, el que guió mis pasos políticos, el que me animó pero después de fracasar él en la política peruana no obstante que fue Diputado (por desgracia acaecida, ya que si no se hubiera muerto el viejo Patricio, nunca hubiera sido nada). Esa experiencia secundaria fue vital para ganar las elecciones en San Clemncio allá por el año de 1987, de cinco Regidores, cinco fueron nuestros, luego en la reelección, también salimos airosos pero hubo un Regidor, de la oposición que no ere nada, sin carácter, sin perfil político, sin peligro alguno, un pobre hombre que pidió solo colocar a su hija en la planilla del Municipio a cambio de callarse la boca, de no decir nada, menos de fiscalizar, cumpliendo su rol de autoridad municipal, total eran nada, hasta los míos, eran nada, era dueño absoluto de sus voluntades y de sus iniciativas, era todo, Alcalde, Regidor, Funcionario y sobre todo Tesorero que era el puesto que más me gustaba y todavía me gusta, porque de ahí salen las acciones que dan solución a todos los problemas que tení el Distrito que me cobijo al venir de San Mateo.

De esa enorme experiencia, el gran salto, el discurso en la Plaza de Armas de Pisco a propósito del problema de límites con Ica. ¡Hay que delimitar el Perú del Perú, Ica de Pisco!, pobre viejo León de Vivero defendía a Ica, si, él era de allá y había que dare duro, ¡carajo, Pisco es de Barlovento hasta Carhuas!, no importa que nadie habite esas tierras llenas de arena salada y bañadas por las aguas del mar de Grau. Así para que salga bacán, la meta es llegar a ser Alcalde de ésta tierra, Alcalde Provincial luego de ser Diputado Regional periodo que interrumpió el chino dejándome misio otra vez, pero al menos construí mi casa en Ica, con cemento y fierro llevado desde San Clemencio y de noche en el carro de Parión, cholito que se contentaba con que le pague con gasolina, también del Consejo, total del mismo cuero salen las correas, total corrupción hay en todos lados, total la corrupción lubrica al sistema como dice Carlos Fuentes en su libro “La Silla del Águila”, total que más da, lo importante es ir capitalizándome, después se vende y listo, a invertir en otro lado en un negocio productivo y no en tiendas de abarrotes que solo me daban cuarenta soles diarios, con esa plata a donde iba, a ningún lado, ni siquiera la venta de cerveza, es un asco, un día uno de los borrachos me dijo: ¡oye, cámbiame el vaso huevón que tiene mucha espuma! Eso definitivamente no daba nada, al menos para avanzar rápido, el negocio de la política necesita de inversión, ¡Político pobre, es un pobre Político!, por eso hemos sabido conducirnos bien y aquí estamos indemnes, puros, soy el más joven de todos y con todo un futuro por delante, tengan la plena y absoluta seguridad que de aquí solo me queda ser Presidente del Perú…

- Viste Yuyo, que bacán habló el Narrador, a todos los dejo perplejos, a todos se los comió, están contentos con él, y se dedicará a entretenerse, mira hasta lo hicieron miembro honorario, igual que la otra noche cuando lo invitaros al Club Social Pisco, sin que pague nada también es miembro honorario, que tal lengua, que tal Narrador de Cuentos es.
- Pero date cuenta Negro, solo los ha mecido, primero en la sierra por lo estrecho de las hondonadas no puede haber haciendas de trescientas hestáreas, al menos de un solo tirón, no se siembran yucar ni camotes, porque son plantas que sólo dan en climas costeños, no seas huevón. Tu sabes lo que es inyectar cianuro a casi doscientas hectáreas de mandarinas y naranjas, eso mata, ¿dónde están los muertos?. Acaso no te das cuenta, o es que no te acuerdas que un loco inyectó cianuro a las uvas chilenas exportadas a la tierra del Tío Sam, muriedon varios gringos y Pinochet tubo que indemnizar a los caídos en esos miserables asesinatos.

Piensa, veinte mil cabezas de ganado vacuno, miles de borregos, alpacas, llamas guanacos, etc. ¿de donde tanto?. No te das cuenta que dijo que eran los más adinerados del departamento? Que padre millonario deja que sus hijos vayan a las punas a pastear ganado no seas incauto “negrito”. El sabe que esta hablando cojudeces, pero no le importa, tampoco lo van a contradecir, solo saca como reflexión final que ésta noche, acuérdate, esta noche a nacido “El Narrador de Cuentos” nuestro Narrador y de seguro lo tendremos por largos años meciendo a la gente de toda la región, esa será su misión y también su destino.